El quiromasaje es un tipo de masaje que encuentra su origen dentro de la metodología del "masaje sueco", creado por Peter Ling, al que con el paso del tiempo sencillamente se le han sumado una serie de variantes a sus manipulaciones originarias.

Si buscamos la palabra quiromasaje en el diccionario de la Real Academia Española encontramos la siguiente definición: "masaje terapéutico dado con las manos". El vocablo, en realidad, es la unión de dos palabras originarias; "quiro"´, de origen griego, que significa mano y "masaje" que significa: "operación consistente en presionar, frotar o golpear rítmicamente y con la intensidad adecuada determinadas regiones del cuerpo, principalmente , con fines terapéuticos, deportivos, estéticos etc.". Por lógica quiromasaje sería cualquier masaje realizado con las manos Sin embargo ya que existen muchos métodos de masaje manual cabe especificar el concepto de quiromasaje. Si recurrimos a libros de terapias naturales, de masajes e incluso a ciertos artículos escritos por médicos, expertos en Medicina deportiva o preparadores físicos, la mayoría de ellos reconocen el quiromasaje como un tipo de masaje muy similar al sueco donde se realizan, principalmente, las manipulaciones básicas originarias del mismo, que son: el rozamiento o "effleurage", el amasamiento o "petrissage" la fricción, la percusión y la vibración. Hoy en día y dada la evolución de las escuelas de quiromasaje, se le han incorporado variaciones a las manipulaciones ya nombradas anteriormente como: la torsión presión, la pinza rodante etc. e incluso movimientos articulares. La metodología del quiromasaje dependerá de la escuela donde se haya cursado la formación académica.

La definición de masaje puede ser tan fría como simple y totalmente opuesta a la filosofía de algo tan cálido, humano y delicado como es dar o recibir un masaje. Es más, muchos de los profesionales que practicamos esta fantástica terapia manual podemos añadir con total convicción y seguridad que se trata de un medio terapéutico más allá de unas concretas manipulaciones manuales y mecánicas. Ello se refleja en el hecho que, tanta importancia tiene la técnica de aplicación y los conocimientos necesarios de Fisiología, de Biología y de Anatomía, como la atención, la intención, la psicología, la empatía y la predisposición humana que, sin duda, se merece toda persona que recurra a nuestras manos en busca de alivio, atención, ayuda terapéutica y bienestar.

La persona que acude a un masajista profesional en demanda de un quiromasaje, en muchas ocasiones tiene en mente recibir un masaje fuerte y enérgico, idea que corresponde relativamente a las maniobras ya nombradas. De todas formas será el masajista profesional quien bajo su buen criterio personalice la técnica a realizar a cada individuo, e incluirá o suprimirá ciertas manipulaciones, atendiendo además con un adecuado ritmo e intensidad y siempre en función de las necesidades del receptor y, principalmente, teniendo en cuenta su estado de salud y la razón por la cual ha solicitado la sesión de quiromasaje.

• El quiromasaje; alivia el dolor y revitaliza el cuerpo.

Sin duda, son muchos los beneficios que podemos obtener del quiromasaje. De hecho, son muchos los profesionales del sector médico, fisioterapeutas, psicólogos, naturópatas y por supuesto masajistas que recomiendan esta técnica ya que está comprobado que el quiromasaje es, en muchos casos, una indispensable herramienta terapéutica. Mejora muchas dolencias corporales, trastornos físicos e incluso ciertas enfermedades. Es más, constituye un método muy placentero del que casi todos nos podemos beneficiar pues el quiromasaje nos aporta bienestar psicológico, físico y además es de gran ayuda para mantener correctamente nuestra salud diaria.

Existen múltiples indicaciones terapéuticas para beneficiarnos del quiromasaje aunque también existen ciertas contraindicaciones importantes a tener en cuenta. Comencemos pues por los casos o supuestos en que es muy positivo ser receptores de una sesión de quiromasaje seria y profesional.

En el tratamiento del aparato locomotor, y siempre que no exista una inflamación importante, está indicado en caso de traumatismos, contracturas, atrofias y fatigas musculares, adherencias, esguinces, dolores tendinosos, distensiones musculares y procesos dolorosos periarticulares (en hombro, codo etc.). Igual de positivo es para los procesos de artrosis, reuma, ciática y problemas relacionados con la columna vertebral como lumbalgia, dolor cervical, dorsalgia y escoliosis. En los trastornos nombrados, el quiromasaje es un elemento muy útil y su fin terapéutico es de primer orden. Las personas aquejadas de esclerosis múltiple, parálisis fláccida u otras dolencias neuromusculares encuentran un gran alivio a la tensión, al dolor y a sus molestias en general.

El quiromasaje es ideal para los practicantes habituales del deporte y es tan aconsejable, antes del esfuerzo físico para evitar lesiones deportivas, como después del mismo para conseguir así eliminar más rápidamente la fatiga muscular.

Cualquier persona que esté pasando por un proceso depresivo, un estado de ansiedad, una crisis de apatía, tanto física como psicológica, o un período de estrés, seguro que en el quiromasaje encuentra una solución para paliar o transformar los efectos tan negativos que su cuerpo está acumulando, y no hay que olvidar que el dolor muscular acumulado en muchas ocasiones puede estar relacionado con un alto componente emocional. De todas formas hay que tener en cuenta que para estos casos existe gran variedad de masajes recomendables.

El quiromasaje actúa como una fuente de vitalidad y de recarga para nuestro querido organismo y es altamente beneficioso para aquellas personas que llevan un ritmo de vida sedentaria, con escasa actividad física, ya que el recibir una sesión de quiromasaje, ésta, se puede comparar a veces a una sesión de gimnasia pasiva.

Otro caso claro donde es recomendable la visita repetida al quiromasajista profesional se da en toda persona que esté realizando una dieta, especialmente con una pérdida de volumen o peso considerable, porque el tejido cutáneo va a sufrir un cambio estructural importante y como consecuencia éste necesitará una tonificación y un fortalecimiento, así como de la masa muscular.

En el supuesto que se haya sufrido una larga convalecencia, recurrir al quiromasaje será de gran ayuda para conseguir más rápidamente la recuperación física oportuna.

En definitiva, el quiromasaje es una técnica manual, personalizada, agradable, humana, artesanal y terapéutica muy beneficiosa para muchos de nosotros y que en la mayoría de los casos podremos disfrutar del alivio, descanso y relax que éste nos proporciona con la seguridad que será una recarga de energía y vitalidad para todo nuestro organismo.

El profesional de la salud deberá tener en cuenta ciertas a la hora de aconsejar o realizar un quiromasaje y éstas son:

- Enfermedades de la piel e ictericia.

- Dolores agudos.

- Fracturas o fisuras no consolidadas.

- Inflamación aguda de la zona a masajear.

- Degeneración fibrosa de los músculos.

- Estadios febriles, infecciones, úlceras internas, enfermedades cancerosas.

- Cardiopatías.

-Tumores.

- Brotes reumáticos agudos.

- Flebitis, linfagitis, trombosis, enfermedades hemorrágicas.

- Lesiones cerebelosas, enfermedad de Parkinson.

- Cálculos de riñón o vesícula.

- Diabetes.

- Diarrea o nauseas.

- Contraindicaciones temporales o relativas: en casos de embarazo, varices, hipertensión, situaciones postraumáticas o postquirúrgicas y en algunos procesos degenerativos.

• Nuestro cuerpo responde...efectos del quiromasaje.

Es obvio que no es por pura casualidad ni por arte de magia. El sentirse bien o muy bien después de recibir una sesión de quiromasaje no es sino una respuesta fisiológica provocada por las manipulaciones recibidas del masajista profesional. Más simbólicamente lo podemos ver como una muestra de agradecimiento que nuestro cuerpo expresa al sentirse atendido y cuidado.

Esta simple respuesta encierra todo un mundo de explicaciones comprobadas científicamente y que en este artículo resumiremos de una forma sencilla y escueta.

Una de las primeras reacciones fisiológicas que experimenta la piel es el incremento de circulación sanguínea. Esto provoca un aumento de la temperatura cutánea. Visiblemente se detecta en la zona una hiperemia como consecuencia de la vasodilatación en los capilares sanguíneos. Al aumentar esta circulación se produce, paralelamente, una mejor y mayor oxigenación celular cutánea y existe un aumento de secreción sebácea y de sudoración que, a la vez, favorece la eliminación de sustancias de desecho de la piel. Al ser la piel receptora de una acción mecánica producida por las manipulaciones de fricción o amasamiento se consigue que en su superficie se produzca una suave descamación y renovación celular. A éste proceso se le conoce como exfoliación cutánea.

En definitiva, la piel se beneficia de una forma instantánea y duradera del quiromasaje dependiendo siempre de la asiduidad con la que éste se reciba. A mayor frecuencia de sesiones de quiromasaje, la piel recuperará o mantendrá un mayor grado de elasticidad, tersura, tonicidad y nutrición cutánea.

El quiromasaje incrementa el aporte sanguíneo al tejido muscular y favorece la eliminación de productos de desecho como el ácido láctico, que se acumula en los músculos fatigados causando dolor. Un masaje prolongado en una zona muscular agarrotada beneficia porque se provoca un aumento de la circulación sanguínea, se distienden las fibras musculares y se alivia el dolor, proporcionando una recuperación más inmediata del cansancio corporal. Por el contrario, también se puede utilizar el quiromasaje como un medio para fortalecer y tonificar la masa muscular.

El quiromasaje tiene una acción directa sobre la circulación arterial y venosa, al aumentar su caudal y provocar un efecto de vasodilatación y vasoconstricción de los canales circulatorios. Como consecuencia de ello existe una mayor oxigenación, un mejor intercambio de nutrientes y una mejora en la eliminación de desechos celulares. Por tanto, la calidad y cantidad sanguínea que llegan a todos nuestros órganos y tejidos es mayor y de mejor calidad y esto se traduce en una mejoría funcional de todo nuestro organismo.

Por el sistema linfático circula un líquido semitransparente llamado linfa. Su principal función es eliminar las sustancias o materias residuales acumuladas en nuestro cuerpo y por otro lado crea un sistema de defensa contra las sustancias perjudiciales para nuestro organismo. Los principales centros (agrupaciones ganglionares) del sistema linfático se encuentran bajo las axilas, ingles, zona torácica, zona clavicular, zona cervical y cuello. Para estimular y beneficiar al máximo nuestro sistema linfático existe una técnica muy concreta de masaje conocido como drenaje linfático que se basa en manipulaciones lentísimas, muy superficiales y realizadas a modo de bombeo manual. El quiromasaje con sus manipulaciones suaves y superficiales también mejora el flujo linfático. El buen funcionamiento del sistema linfático proporciona al organismo un sistema inmunológico más poderoso y fuerte para defenderse de diversas enfermedades e infecciones.

Millones de terminaciones nerviosas recorren nuestro cuerpo siendo receptoras y productoras de múltiples sensaciones corporales. Los efectos del quiromasaje sobre el sistema nervioso son: calmantes, analgésicos y estimulantes. Uno de los efectos estudiados como respuesta de nuestro cuerpo es la maravillosa sensación relajante y tranquilizadora del sistema nervioso debido, en parte, a la producción de endorfinas.

En resumen, el quiromasaje es un método muy positivo al que recurrir en caso de sentirnos aquejados de algún trastorno físico, dolencia o fatiga corporal y estrés psicológico. También podemos recurrir a esta terapia manual sencillamente por el gusto de mimarnos y cuidarnos más y mejor.

Si queremos mejorar nuestra salud y nuestro bienestar el quiromasaje puede ser una fantástica opción al alcance de muchos, incluido tú, aprovéchalo y disfruta.