Cebolla
Allium cepa, L.
CaracterÃsticas
Esta planta, tan común, cultivada en todas las huertas para alimento, condimento y empleo medicinal, tiene un tallo derecho que alcanza hasta medio metro, sin vellos, hueco, terminado en una cabezuela de flores encerradas dentro de una delgada espata membranosa. El bulbo es muy jugoso, y está compueslo de capas membranosas compuestas, a su vez, por telitas muy delgadas y transparentes. Las hojas nacen del mismo bulbo y son cilÃndricas, huecas y puntiagudas, de 15 a 50 cm de largo.
Valor nutritivo
Usada como alimento, la cebolla es considerada por los nutricionistas e higienistas como un vegetal muy saludable cuyo empleo —si no fuera por su olor desagradable— debiera generalizarse mucho más. Sobre todo las personas gordas, linfáticas, o de digestión lerda debieran consumirla en buena cantidad, pues parece providencial-mente destinada a ellas. En cambio, no convienen a personas flacuchentas, nerviosas, sanguÃneas o irritables, ni a las que son propensas a las hemorragias o sufren de alguna enfermedad a la piel.
Se la puede comer cruda, cocida, frita, asada, en guisos, en ensaladas, en embutidos y rellenos.
Es cierto que el aceite volátil que contienen todas las partes de la planta, de olor muy penetrante, irrita los ojos y hace llorar; pero este efecto desaparece al cocer el bulbo y aun lavándolo con agua caliente. Cociéndolo, incluso se vuelve dulce.
Es cierto que, cruda, la cebolla es difÃcilmente digerible por estómagos débiles, ocasiona eruptos desagradables y da mal olor al aliento; pero este inconveniente es mucho menor que los beneficios que aporta su consumo.
También es cierto que, cocida, se vuelve insÃpida y pierde muchas de sus propiedades (por la eliminación de su aceite esencial); pero, a la vez, obtiene propiedades calmantes, lenitivas y pectorales y, aliñándola convenientemente, adquiere un sabor aun más agradable.
Cierto autor recomendaba, en una revista médica, que a los niños se les dé a comer, 2 ó 3 veces por semana, cebollas tiernas crudas —o bien, cocidas y sazonadas si son grandes— para preservarlos de muchas enfermedades peculiares de la infancia.
Varios médicos franceses han considerado la sopa de cebollas como un restaurador excelente de los órganos digestivos.
El oro queda brillante lavado en agua en que se han hervido cebollas.
Uso medicinal
Lomo substancia medicinal, la cebolla tiene varias aplicaciones de reconocida eficacia, por lo que no debe ignorarse en el hogar como remedio simple, módico y efectivo.
En sÃntesis, las cebollas son estomacales, expectorantes, vermÃfugas y diuréticas; se usan para combatir el catarro pulmonar, la los bronquial, la hidropesÃa, la retención de orina, las lombrices intestinales, el escorbuto, los lamparones; estimulan el sistema circulatorio, la salivación y la secreción de jugos gástricos, ayudando a la digestión.
La mejor manera de administrarlas es en forma de jugo recién exprimido, que se mezcla con jarabe, en dosis de 4 a 6 gramos, repartidos en varias tomas.
a. La cebolla cruda (y también cocida) previene y combate eficazmente la gripe, las pulmonÃas y el resfrÃo común.
Nerón, que cuidaba mucho su voz, para librarse de un resfrÃo o una ronquera, no comÃa absolutamente nada, ni pan siquiera, sino únicamente puerros con aceite y con unas gotas de vinagre.
Para el mismo efecto, nuestros abuelos acostumbraban envolver una cebolla en una hoja de repollo, la cocÃan al rescoldo, luego la machacaban hasta reducirla a pulpa, la mezclaban con una taza de leche o un cocimiento caliente de regaliz ("palo dulce") y se acostaban arropándose bien. Por la mañana hacÃan lo mismo. El resultado era infalible.
Este preparado facilita mucho la expectoración.
La epidemia de gripe de 1919 azotó despia dadamente gran parte de Europa, llegando a causar cerca de 6 millones de vÃctimas en 3 meses. Un médico militar francés, de re conocida competencia profesional, trató a sus pacientes con jugo de cebollas macha cadas en dosis de 200 cm3 diarios mezclados con té caliente, divididos en 3 tomas. La fie- bre desaparecÃa a los tres dÃas. De 80 enfer- reos tratados en esta forma, no se registré ni una sola defunción. Hasta un paciente atacado de bronconeumonÃa, asà tratado y ayudado con lavativas, se recuperó a los 6 dÃas. Simultáneamente se aplicaban a los enfermos cataplasmas sobre el pecho. Los resultados concluyentes que acabamos de citar merecen la atención del público y de los médicos.
- Contra las pulmonÃas, la cebolla se aplica en crudo, en esta forma: Se corta el bulbo en cruz, se pone en una olla cerrada y se somete a una temperatura suave. Cuando haya soltado cierta cantidad de jugo, se rocÃa con esencia de trementina y se aplica en uno o ambos lados del pecho; se sujeta con un vendaje y se aguarda a que enrojezca la piel ("sistema ignaciano") .
- Desde que el Dr. F. Kraft anunció que las cebollas v el aceite común son excelentes preventivos contra la escarlatina y la difteria, los hechos no han dejado de confirmar su teorÃa, y han despertado un gran interés en el mundo médico.
En sus investigaciones, el Dr. Kraft ha descubierto que, en las casas donde se han registrado casos de difteria o de escarlatina, ni los enfermos ni sus familias comÃan cebollas con aceite; y, en cambio, en las regiones en que se consumen ambas cosas en abundancia, rara vez se producen tales enfermedades. Recomienda, en consecuencia tal consumo en la mayor cantidad posible, al menos en tiempos de tales epidemias. La cebolla también se puede comer frita o cocida, pero lo mejor es comerla cruda con aceite al acostarse.
- La cebolla verde ("de verdeo") , ingerida cruda, se usa en Chile como un diurético útil a las personas que padecen de arenilla. También la cebolla de color encarnado es un diurético casi sin rival.
- Las cebollas crudas, machacadas y mezcladas con leche frÃa, se suelen dar como alimento exclusivo en el tratamiento de la hidropesÃa.
- La cebolla de la clase blanca, cruda, se aconseja para curar el insomnio.
La cebolla tiene también propiedades antiflatulentas, sobre todo picada en el caldo.
Cocida, la cebolla es calmante, emoliente y pectoral; sirve, además, contra el mareo y la puna.
Se asegura que triturada la cebolla cruda, reducida a pulpa y aplicada en forma de cataplasma, produce efectos cáusticos. Se puede aprovechar esta circunstancia si se quiere irritar la piel cuando lo exige algún accidente. Se aplica también, en esta forma.. en las quemaduras de primer y segundo grado, las que alivia de inmediato. Algunos médicos la usan para ablandar tumores y hacerlos llegar a la supuración, aplicando cataplasmas dos veces al dÃa.
Asada en rescoldo, la cebolla constituye una cataplasma lenitiva que puede aplicarse con buen éxito en furúnculos, abscesos pequeños y frÃos, y en panadizos.
Se dice que haciendo una cataplasma con cebollas machacadas y aplicándolas en las plantas de los pies, alivia y sana a las personas atacadas de tifus. Pero hay que renovar constantemente estas cataplasmas. |