ALCOHOLISMO

El alcoholismo es una de las formas más comunes de ADICCIÓN que se desarrolla cuando la persona adquiere tolerancia al alcohol (su organismo se acostumbra a absorber cantidades tan grandes que ya no puede funcionar normalmente sin ellas) y experimenta síntomas de abstinencia cuando permanece sin beber. Dichos síntomas son impulsos  irresistibles de ingerir alcohol, incapacidad de beber con moderación y, conforme la enfermedad avanza, necesidad de aumentar la dosis para obtener el mismo efecto.

Por lo general el alcoholismo se manifiesta lentamente, al cabo de varios años de beber en forma inmoderada. La persona comienza a ingerir alcohol para obtener aceptación social, para reanimarse o para olvidar sus preocupaciones: con el tiempo su organismo se vuelve dependiente del alcohol, y si no lo ingiere en la cantidad acostumbrada, empieza a sufrir síntomas de abstinencia como desasosiego, somnolencia, temblor muscular y, en los casos graves, delírium trémens (reacción que se caracteriza por taquicardia, fiebre, ansiedad intensa y a veces alucinaciones).

El alcoholismo siempre debe ser tratado por un médico pues el consumo excesivo y consuetudinario de alcohol puede provocar  TRASTORNOS HEPÁTICOS graves, daño cerebral, CÁNCER de boca, garganta y páncreas, OBESIDAD, ANEMIA, TRASTORNOS SEXUALES y diversas enfermedades del estómago, el sistema nervioso y el corazón. Otras consecuencias negativas del alcoholismo son la HIPERTENSIÓN, la deficiencia vitamínica por la tendencia de la persona a descuidar su alimentación, y diversos problemas sociales, familiares y emocionales.

Autoayuda La prevención es la mejor medida para combatir el alcoholismo. Hay que controlar el consumo de alcohol en situaciones sociales contando y midiendo los tragos ingeridos, aun en casa, así como fijarse un límite diario y comer algo mientras se bebe para volver más lenta la absorción de alcohol en la sangre. Otras medidas preventivas son beber despacio —no tomar  más de una "unidad"  en media hora—: combinar cada trago con una bebida no alcohólica; abstenerse de beber si se va a manejar un vehículo, y nunca combinar alcohol con medicamentos.

Lo que los terapeutas aconsejan

Naturopatía El terapeuta aconsejará comer bien, hacer EJERCICIO, evitar beber, exponerse menos al ESTRÉS y resolver los problemas emocionales. Se considera que estos remedios son particularmente efica-

ces si se combinan con PSICOTERAPIA, ACUPUNTURA e HIPNOTERAPIA.

Herbolaria El aceite de hierba del asno puede ser provechoso pues es rico en ácido gammalinolénico, que el organismo del bebedor a menudo es incapaz de producir: se cree que ayuda a prevenir el daño hepático y los cambios abruptos de estado de ánimo.

El fruto del cardo lechero contiene silimarina, un compuesto que contribuye a regenerar las células del hígado. Estos remedios herbales al parecer también ayudan a contrarrestar los síntomas de abstinencia pues mitigan la tensión y relajan el cuerpo y la mente del bebedor.

Algunos datos para reflexionar

El consumo inmoderado de bebidas alcohólicas tiene una alta con los intentos de suicidios y los accidentes de transito.

Cada año hay pérdidas por miles de millones de dólares en todo el mundo como consecuencia del ausentismo laboral derivado del abuso de bebidas alcohólicas.

El alcoholismo guarda relación directa con el aumento del índice de delincuencia en muchas naciones.

Muchos gobiernos destinan cuantiosos recursos económicos cada año para el tratamiento y rehabilitación de enfermos alcohólicos a costa de la educación y otros servicios públicos.

Los factores de riesgo

Pocas personas se atreven a admitir que tienen problemas con la bebida. Estas pruebas sirven para averiguar si alguien necesita ayuda.

¿Cuántas de las pautas de comportamiento siguientes manifiesta el bebedor?

Bebe para olvidar algún problema personal o familiar o porque está deprimido o ansioso.

Se embriaga ocasionalmente hasta perder la conciencia de sus acto. intercala periodos de abstinencia cada vez más breves entre parrandas. Ingiere cantidades pequeñas de alcohol durante todo el día, es decir, no deja de beber aunque nunca se embriaga del to-do ni pierde el control de sus actos.

Las dos últimas pautas son señal de adicción física al alcohol, y las dos primeras se consideran factores de riesgo.

Pida a la persona que conteste con un "si" o un "no" estas preguntas:

1 ¿Hace planes para beber o realiza actividades que lo lleven a propasarse?

2 ¿Beber solo le parece tan disfrutable como con compañía?

3 ¿EI beber lo reanima o le hace experimentar alguna sensación especial?

4 ¿El alcohol lo ayuda a relajarse, a dormir o a enfrentar los problemas?

5 ¿Aparta dinero y tiempo para beber?

6 ¿Con frecuencia termina bebiendo más de la cuenta?

7 ¿Le parece que puede beber más que otras personas?

Cuatro respuestas afirmativas pueden indicar adicción al alcohol: la persona debe acudir a un médico o a alguna organización de ayuda a alcohólicos. Incluso una sola respuesta afirmativa puede ser señal de propensión al abuso.

Flores de Bach Estos remedios supuestamente ayudan a la persona a comprender las causas  de su hábito alcohólico y se usa cuando hay ansiedad descascarada , la anana silvestre se prescribe a quienes se avergüenzan de sí mismos, y el álamo temblón sieve para el temor y la paranoia.

 El tratamiento con hipnosis se usa en las primeras etapas de la enfermedad y tiene el propósito de reforzar la determinación de dejar de beber y fijar en el subconsciente de la persona la idea de que este hábito es nocivo para la salud.

El punto de vista ortodoxo

Algunos médicos aconsejan recurrir a la TERAPIA POR AVERSIÓN, que consiste en administrar al paciente un medicamento que lo hará vomitar o sentirse muy mal si ingiere alguna bebida que contenga alcohol. También se emplean algunas formas de psicoterapia, entre ellas la TERAPIA CONDUCTISTA y la de grupo.

Otra posibilidad es que un trabajador  social colabore con el medico para dar auixilio y consejo al bebedor y a sus familiares, o bien, que éste sea enviado a alguna clínica de rehabilitación.

Dónde encontrar ayuda

Se puede acudir a algunos hospitales públicos o entidades privadas o religiosas que prestan apoyo a la población con problemas de alcoholismo.

Asimismo, se recomienda acudir a Alcohólicos Anónimos (AA), en cuyos grupos, sin fines de lucro y que generalmente funcionan las 24 horas, se da atención a quienes así lo requieren.

Los familiares de personas alcohólicas pueden acudir a los grupos de Alcohòlicos Anónimos.

Hipnoterapia El tratamiento con hipnosis se emplea en las primeras etapas de la enfermedad  y tiene el propósito de reforzar la determinación de dejar de beber y fijar en el subconsciente de la persona la idea de que este hábito es nocivo para la salud.

Dónde encontrar ayuda

Se puede acudir a algunos hospitales públicos o entidades privadas o religiosas que pre tan apoyo a la población con problemas de alcoholismo.

Asi ismo, se recomienda acudir a Alcohólicos Anónimos (AA), en cuyos grupos, sin fines de lucro y que generalmente funcioan las 24 horas, se da atención a quienes así lo requieren.