Naranjo Dulce
Citrus aurantium nobile, Risso o
Citrus aurantium, L.
Características
Este árbol, de aspecto tan elegante, tiene hojas alternas siempre verdes, lisas, puntiagudas. Las flores, en número de 2 a 6, sobre pedúnculos axilares, lisos y solitarios, son de un blanco muy puro, sembradas de glandulitas verdosas. Hojas, flores y epicarpio están cargados de un aceite esencial volátil.
Es originario de la China y de las islas de los Océanos Indico y Pacífico. Hay pruebas documentadas de que este árbol se cultiva en Santiago desde 1572.
Hay muchas clases de naranjas, pero todas poseen propiedades muy semejantes.
Uso medicinal
Se usan sus hojas, flores, frutos y esencia.
- Las hojas —que son mejores para la salud que las del limonero—, se emplean en infusión, 10 gr por litro de agua, como sudoríficas y ligeramente antiespasmódicas, tónicas, febrífugas, estomacales. Se usan con éxito en la dispepsia, en las cefalalgias, en las afecciones nerviosas —histeria, hipocondría, palpitaciones—, en la tos convulsiva.
También se emplean en polvo, en dosis de 40 centígramos, como estomacal.
Téngase cuidado de escoger las mejores hojas, desechando las amarillentas o manchadas; de secarlas con prontitud y precaución; de conservarlas en lugares secos y al abrigo de la luz.
También se pueden emplear hojas frescas; pero en tal caso son preferibles las del naranjo agrio (véase "Naranjo amargo") que, como ya se ha dicho, son más amargas y aromáticas.
- Externamente, las hojas de naranjo se usan para curar los "golpes de aire": paralización de nervios faciales, torceduras de la boca, ojo caído. Junto con la aplicación de descargas eléctricas, ha habido médicos que utilizaron el método de aplicar almohadillas de algodón caliente con hojas de naranjo encerradas entre sus capas, con resultados verdaderamente sorprendentes.
- Las flores, blancas y olorosas, también se usan mucho, pero tomando sólo los pétalos y desechando los cálices. Se secan en la estufa o al sol y luego se guardan en frascos herméticos.
Se usan, o bien en infusión (2 gr por litro de agua) , o bien en jarabe (30 gr) , o, sobre todo, en hidrolato o agua destilada muy suave, llamada "agua de azahar", que se usa tanto en el arte culinario como en medicina (de 30 hasta 90 gr), como antiespasmódico y calmante, bastante utilizado en los dolores de cabeza y del estómago.
El agua de azahar participa de las cualidades de las hojas y ejerce una especial acción sedante sobre el sistema nervioso.
El agua preparada con las flores de naranjo agrio es mucho más suave.
- Con el fruto se puede hacer naranjadas, que son agradables y refrescantes. Se prescriben pedazos de naranja en las enfermedades febriles e inflamatorias, para aplacar la sed y "engañar el apetito de los enfermos".
También se utilizan las naranjas para elaborar licores y vinos estomacales excelentes:
Ratafia de naranjas:
Se toma un litro de aguardiente y tres naranjas escogidas, maduras y de piel lisa; se cortan en 4 pedazos y se ponen en el aguardiente, dejándolas allí 20 días. Se disuelve un kg de azúcar en medio litro de agua, se pasa este jarabe por una tela y se añade al aguardiente con las naranjas. Se deja el todo por 8 días, se filtra y se embotella. Se obtendrá un licor estomacal muy agradable que será tanto más precioso cuanto más envejezca.
Vino de naranjas:
Se toma una porción de naranjas bien maduras, se exprimen y se pasa el jugo por un colador sobre una vasija.
Se añade al líquido 1 kilo de azúcar por cada 5 litros, si las naranjas eran agrias o medio kilo si son dulces y, además, 1 litro y cuarto de agua también por cada 5 litros de jugo.
Se pone el líquido resultante en botellas tapadas, se deja fermentar allí y se tendrá, a los pocos días o meses, un vino excelente.
Con los residuos se puede fabricar un excelente vinagre.
- En varios países europeos se saca de sus frutos o de su cáscara un aceite volátil muy apreciado que los perfumistas utilizan para infinidades de aguas aromáticas y especialmente en el Agua de Colonia. El uso más común que se hace de su cáscara es para la preparación de confites y conservas, haciéndola hervir unas cuantas veces en un jarabe de- azúcar.
En el comercio se vende un aceite volátil, conocido con el nombre de Neroli, el más estimado por los perfumistas.