APENDICITIS
La apendicitis es una afección muy común que se manifiesta cuando se inflama o infecta el apéndice cecal, una pequeña prolongación en forma de gusano situada en el fondo del ciego, que es una porción del intestino grueso. Hay dos tipos de apendicitis, uno más grave que el otro, razón por la que los síntomas deben identificarse con cuidado.
Cómo actuar si hay señales de apendicitis
Acostarse, evitar las corrientes de aire y usar una botella de agua caliente para mitigar el dolor.
No comer ni beber; enjuagarse la boca con un poco de agua si se requiere. No tomar laxantes, analgésicos ni ningún otro medicamento.
Llamar a un médico si el dolor aumenta o no cede al cabo de cuatro horas.
La inflamación leve del apéndice, llamada apendicitis crónica, provoca una sensación de malestar ocasional en el cuarto inferior derecho del abdomen, pero aunque dicho síntoma puede aparecer intermitentemente durante varios meses, rara vez requiere tratamiento de urgencia.
Los síntomas de la apendicitis aguda, que ocurre cuando la inflamación se agrava, tardan de 4 a 48 horas en desarrollarse, y comienzan con un dolor sordo cerca del ombligo, náuseas y a veces vómito; la persona tiende a perder el apetito y a sufrir estreñimiento. Al cabo de unas horas el dolor se intensifica y se extiende al cuarto inferior derecho del abdomen; la temperatura corporal aumenta y hay mal aliento. En algunos casos el dolor desaparece después de varias horas, lo que no significa forzosamente que la inflamación ha cedido.
Si alguien muestra síntomas de apendicitis aguda, hay que llamar a un médico sin tardanza pues el apéndice puede reventarse, provocar peritonitis (inflamación de la membrana que recubre la cavidad abdominal) y quizá la muerte. Si el médico confirma que se trata de apendicitis, hará que trasladen a la persona a un hospital para que sea intervenida quirúrgicamente.
Advertencia No es aconsejable recurrir a alguna terapia natural para curarse de una apendicitis crónica sin antes consultar a un médico. En cuanto a la apendicitis aguda, la cirugía es indispensable.
Lo que los terapeutas aconsejan
HERBOLARIA
Autoayuda Para aliviar los síntomas crónicos se aconseja tomar tres veces al día una taza de infusión de agrimonia, que tiene propiedades antiinflamatorias.
ACUPUNTURA
Consulta Es probable que el tratamiento comience con aplicación de agujas en el cuello y después en diversos puntos del abdomen o una pierna, combinado con sesiones de MOXIBUSTION.
APLICACIÓN DE VENTOSAS
La técnica de aplicación de ventosas fue utilizada durante siglos en Occidente pare combatir numerosos padecimientos. Hoy día sigue siendo parte de la medicina tradicional china y se emplea principalmente para aliviar FORUNCULOS, abscesos y ciertos casos de ARTRITIS, REUMATISMO, ASMA MORETONES. RESFRIADO y ESCALOFRÍO.
Consiste en aplicar ventosas de vidrie o de bambú de diversos tamaños en e cuerpo del paciente, por lo común en la es palda. El terapeuta sujeta un hisopo de al godón con unas tenazas, lo sumerge er alcohol, lo enciende y luego lo pasa por e borde de la ventosa, que sostiene inverti da con la otra mano. El calor provoca que se expanda el aire contenido en la ventos y que escape parte de él, momento en e cual el terapeuta coloca ésta en la piel del paciente; una vez que se enfría, el vacío parcial que se forma "succiona" la piel, hace que ésta se adhiera al borde de la ventosa y que afluya más sangre a esa zona. Para soltar la ventosa basta con presionar la piel alrededor del borde de la misma. El tiempo que se dejan las ventosas en su sitio depende de la edad, la complexión y la afección del paciente.
Los médicos occidentales creían que la mayor afluencia de sangre a la zona de piel en que se colocaban las ventosas eliminaba las impurezas de los órganos y los tejidos contiguos; a veces incluso se hacían incisiones superficiales en la piel para que los "venenos" salieran junto con la sangre. A principios de este siglo todavía había médicos que aplicaban ventosas para "drenar" forúnculos.
Para los médicos chinos el propósito de la aplicación de ventosas es expulsar de: organismo la energía vital (chi) indeseable o "perversa"; consideran que las ventosas atraen dicha energía a la superficie de: cuerpo y que allí se disipa.