Los indios de la Amazonas emplean la resina de Guayacán para curar el reumatismo. El Guayacán se usa como depurativo en forma de tintura, ya solo o asociado a la zarzaparrilla como en la siguiente formula:
Polvo de corteza de Guayacán 30 grs.
Zarzaparrilla 30 grs.
Alcohol puro 300 grs.
Se deja macerar por 15 días, se filtra y se le agregan 500 gis. de vino generoso. Se administra por cucharadas, tres veces al día.
EI jarabe de Guayacán es muy elogiado por el señor Amador Belalcázar, quien dice haberse curado con él de la lepra; se compone de la siguiente manera:
Corteza de Guayacán muy machacada, media libra, la cual se pone en cuatro Botellas de agua, se deja en ingestión. Por 24 horas, después de las cuales se pasa por un lienzo, se le estruja. Se puede agregar 4 libras de azúcar y se pone a hervir hasta que dé punto alto. El jarabe se administra en agua caliente a la manera de té, una cucharada en ayunas, otra las 1 1 am, otra a las 4 de la tarde y la última a la hora de acostarse.
Se dice que estas propiedades fueron dadas a conocer por un alemán a don Miguel Vásquez, quien popularizó esta noticia. El cocimiento de Guayacán también ha sido empleado como antisifílico.