Medicina especial para curar las enfermedades intermitentes. Mas ha disminuido la necesidad de quina en el mundo al descubrirse drogas antimaláricas como el aralén. Pero todavía muchas aplicaciones de la buena quinano se logran sino con la corteza natural: vinos quinados, drogas diversas. Según el profesor Weaver, la quina se emplea como hipnótico, contra el insomnio y contra la fiebre tifoidea, a la dosis de 0.40 centigramos cada hora.

Según el Dr. Cleveland, contra las pústulas malignas; según el Dr. Tivas, a quina es empleada como febrífuga contra las intermitentes, en forma de sulfato de quinina. También se emplea a quinina como antipútrida en las gangrenas. La quina en polvo es empleada :omo estomacal, a la dosis de 0.10 grs. Sola o mezclada con ruibarbo, en cápsulas, una antes de cada comida.

La infusión de la corteza, en la proporción de 20 grs, de ésta, en 1 .000 grs, de agua, se emplea como tónico.

Se toma en tacitas en el término de 24 horas. El vino de quina es un tónico antiescorbútico y digestivo; se prepara así:

Quina desmenuzada 100 grs.

Alcohol puro 120 grs.

Después de una maceración de 8 días se le agregan dos litros de vino generoso y se deja macerando nuevamente durante 20 días. Luego se filtra y se rotula. Se administra por copitas, una antes de cada comida.