Salvia (Salvia officinalis, ing. Sage)
Desde épocas remotas la salvia gozó de reputación como una planta que curaba si no todos, al menos muchos, de los males de la humanidad. De hecho su nombre proviene de una raÃz latina que significa salvar o sanar. Uno de los efectos que se le atribuÃa era el de estimular la fertilidad femenina. En la actualidad sabemos que la salvia contiene ciertas sustancias que poseen propiedades estrogénicas y que aunque no posee el pretendido efecto estimulante de la fecundidad, si tiene importantes aplicaciones en la salud femenina. Las investigaciones modernas nos indican que la salvia tiene propiedades que la hacen útil en un buen número de condiciones.
Durante milenios la salvia se ha empleado en la cocina. Se sabe que ayuda al proceso digestivo estimulando la secreción de bilis. Es particularmente útil ayudando a reducir la acumulación de gases intestinales y calmar los cólicos abdominales.
La salvia contiene unas sustancias llamadas fitoesteroles que tienen un efecto estrogénico y refrescante. En las mujeres menopáusicas reduce la sudoración excesiva, por lo que es muy eficaz para reducir los calentones y sudores nocturnos. Una de sus caracterÃsticas es que reduce o detiene el flujo de leche materna por lo que no debe ser utilizada por mujeres que estén en el proceso de amamantar a su bebé.
La salvia también puede usarse externamente. Posee propiedades antisépticas por lo que es útil aplicar una toalla que previamente ha sido mojada con una infusión de salvia sobre las picadas de insectos y cortaduras leves en la piel. También es útil en casos de gingivitis (inflamación de las encÃas) y aftas bucales.
Cuando es consumida regularmente la salvia ayuda a reducir los niveles de azúcar en la sangre de personas diabéticas.
Un té de salvia se puede preparar por el método conocido como infusión usando tres o cuatro hojas por cada taza de agua. En el caso de niños y personas de edad avanzada se deben usar menos hojas o añadir más agua para lograr un te menos fuerte. Las hojas se colocan en un recipiente que pueda ser cerrado. Se hierve el agua, se echa sobre las hojas y se cierra el envase. Se deja durante unos diez minutos. Se pueden tomar tres o cuatro tazas diarias de este té. Usado en forma de gárgaras ayuda a aliviar la tos de los fumadores y el picor de garganta.
Precauciones La salvia contiene un aceite volátil llamado tuyona que usada en grandes cantidades puede provocar convulsiones en personas que padecen de epilepsia. No se debe usar en grandes cantidades durante el embarazo. Como ya dijimos, en los niños y personas de edad avanzada se debe usar una dilución mayor. |