Yohimbina
La yohimbina es un compuesto de origen vegetal. Fue uno de los tratamientos orales pioneros para la disfunción eréctil. Es un derivado de un alcaloide extraÃdo de plantas (Rauwolfia Serpentina) y de la corteza de árboles de la familia Rubaceae. Alguna vez se le denominó 'afrodina' en el lenguaje popular.
Su utilización en el terreno sexológico surgió en la década de los 60. Además de usarse para corregir la disfunción eréctil −de causa orgánica y leve o moderada-, la yohimbina ha sido empleada en varones con disminución del deseo o con eyaculación retardada. Sin embargo, sus resultados no están demostrados con ensayos clÃnicos concluyentes y su eficacia siempre ha estado sujeta a muchas polémicas.
La yohimbina seguramente debe su apelativo popular de 'calientaburras', a que es prácticamente la primera sustancia conocida en occidente que, vÃa oral, presenta, aunque muy leve, algún efecto prosexual. Esto le ha venido granjeando su fama como afrodisÃaco. AsÃ, ha venido utilizándose en veterinaria como estimulante de los sementales, siendo objeto de múltiples anécdotas y leyendas urbanas.
Tras el modesto auge que tuvo en los años 60, pasó a un segundo plano y ha tenido un resurgir más o menos reciente en la década de los 90. Como ya hemos comentado, su efectividad es muy escasa y con la entrada de la Viagra en el mercado en 1998, la yohimbina pasó a ser historia dentro de la farmacoterapia sexual de la disfunción eréctil.
En el uso de la yohimbina se debe tener en cuenta que está contraindicada en pacientes hipertensos e hipotensos. Algunas veces produce alteraciones gástricas −molestias, dolores, cólicos o diarreas−. Aunque normalmente se administra por vÃa oral, en algunos paÃses existen formulaciones para su uso sublingual. En cuanto a los efectos adversos que puede producir, se encuentran: temblores, cefaleas, insomnio, irritabilidad, aumento de la actividad psicomotora. Pero lo más destacado es su poder de inducir ataques de pánico. De hecho, en estudios experimentales sobre ansiedad se viene utilizando como modelo de inducción de la misma, asà que, si no se quiere pasar un mal rato y salir huyendo, cuidado con su uso.
Hasta hace muy poco tiempo, la yohimbina fue la única alternativa oral para el tratamiento de la de la disfunción eréctil. De ahà que, a pesar de todo, hay hombres que han decidido probar este compuesto vegetal.
Otras apuestas vegetales son el ginkgo biloba, que se usa para estimular la circulación sanguÃnea del pene; y el ginseng, considerado durante siglos por los asiáticos como estimulante sexual.
En cualquier caso, no está demás decir que, si decide tomar cualquier compuesto, siempre es mejor contar con el consejo directo de un médico o farmacéutico.