HIPERACTIVIDAD

Se llama hiperactividad al trastorno infantil de la conducta caracterizado por inquietud excesiva y constante, incapacidad para fijar la atención durante un tiempo razonable, deficiencias de coordinación motora, inestabilidad anímica, urgencia de satisfacer los propios deseos, insomnio e impulsividad. Todos estos síntomas alteran en grado variable el desempeño escolar y la relación del niño con sus padres y maestros.
La hiperactividad afecta entre 2 y 5% de los niños, y es 10 veces más frecuente entre los de sexo masculino. Puede tener causas emocionales (falta de armonía familiar o un ambiente educativo rígido y exigente) o deberse a una alteración fisiológica del cerebro: no obstante, en algunos casos se ha asociado con una reacción alérgica (ALERGIA) a ciertos alimentos y sustancias químicas, de ahí que con frecuencia se acompañe de otros padecimientos alérgicos, como el ASMA, la FIEBRE DEL HENO, el ECCEMA y el CATARRO.

Entre los alimentos implicados se cuentan los lácteos, el azúcar, el trigo y sus derivados, las frutas cítricas y aquellos que contienen grandes cantidades de salicilatos (sustancias similares a la aspirina), como la manzanilla, la uva, la arveja, los frutos secos, las almendras y el vinagre. También contienen salicilatos algunos aditivos alimentarios como la tartracina.
Las sustancias químicas señaladas como causas posibles incluyen cadmio (presente
en el humo del tabaco), aluminio, cobre, mercurio, flúor (FLUORACIÓN), cloro, limpiadores domésticos, perfumes y contaminantes ambientales. Es posible que en la hiperactividad intervengan asimismo deficiencias de magnesio, manganeso, cinc, vitamina B6 y ácidos grasos.
Lo que los terapeutas aconsejan

Los tratamientos incluyen la prescripción de vitaminas, minerales y otros complementos, junto con una dieta de eliminación destinada a identificar los alergenos. Esta última requiere tiempo y paciencia, pero casi siempre se logra determinar la causa del padecimiento.
Naturopatía En opinión de muchos practicantes, la causa principal de la hiperactividad es la intolerancia a ciertos alimentos, sobre todo los que contienen aditivos. No obstante, antes de imponer restricciones a la dieta, el naturópata tratará de encontrar otras causas, y recomendará mientras tanto aumentar el consumo de alimentos sin procesar.
Homeopatía El tratamiento es individual, pero por regla general se recomienda evitar los alimentos procesados y las sustancias tóxicas.
Terapia por medio de la danza Al principio se permite al niño desahogar su energía con entera libertad. El terapeuta acompaña sus movimientos, procurando establecer una sólida relación con él, y más tarde lo alienta a descubrir nuevas habilidades. De este modo, el niño acaba por encauzar su energía de manera más productiva.

El punto de vista ortodoxo
El número de casos de hiperactividad ha ido en aumento en los últimos 20 años: algunos médicos consideran que en ello desempeñan un papel fundamental los colorantes que se añaden a infinidad de dulces y golosinas, por lo que recomiendan abstenerse de ellos. Si el pediatra sospecha que el trastorno tiene causas emocionales o neurológicas, seguramente recomendará acudir a un psicoterapeuta o neurólogo.