HISTERIA

Aunque en otro tiempo llegó a pensarse que la histeria no afectaba sino a las mujeres y que su causa eran las necesidades sexuales frustradas, hoy se sabe que esta compleja forma de neurosis no siempre se relaciona con conflictos de tipo sexual y tampoco es exclusiva de las mujeres, si bien predomina entre ellas. La persona predispuesta tiene ciertos rasgos de carácter, llamados histeroides (egocentrismo, afán de llamar la atención, excesiva dependencia de los demás, sugestionabilidad y volubilidad(, que pueden llegar a la exageración y constituir un desequilibrio mental.
 
Cada vez que el histérico enfrenta una situación que le causa ansiedad, puede presentar trastornos del comportamiento o síntomas físicos muy diversos, como lapsos de ceguera, parálisis o amnesia. Sin embargo, la complacencia o indiferencia que manifiesta ante tales reacciones hacen patente la ventaja que con ellas obtiene: huir de la ansiedad sustrayéndose a la situación que la produce.
El punto de vista ortodoxo
Para que el tratamiento sea eficaz, hay que identificar el origen de la ansiedad y resolverlo. Si sólo se tratan los síntomas, éstos quizá desaparezcan, pero el trastorno seguramente persistirá, adoptando nuevas formas de expresión. En el caso de la llamada histeria de conversión (la que se manifiesta con síntomas físicos), el médico debe descartar primero la existencia de una causa orgánica.

La PSICOTERAPIA se emplea con éxito para resolver el conflicto subyacente, combinada mientras tanto con la administración de tranquilizantes para aliviar los síntomas.

La HIPNOTERAPIA aplicada por un especialista también ha dado resultado.
Cuando una persona sufre un ataque de histeria y pierde el dominio de sí misma, hay que mantener la calma, procurar que no tenga observadores y tratar de resolver la situación que desencadenó el ataque.
Las bofetadas pueden causar más daño que beneficio: es preferible buscar atención médica.
Lo que los terapeutas aconsejan
Yoga Los maestros insisten en la importancia de la relajación y la respiración natural para calmar las crisis emocionales. Además, el restablecimiento de la respiración normal es esencial para reducir la TENSIÓN MUSCULAR. Los casos crónicos pueden mejorar con la práctica de la MEDITACIÓN.
Por otra parte, el estudio profundo del yoga constituye una distracción que puede paliar los conflictos que han dado origen a la histeria..